ATLÁNTIDA FILM FEST

El mayor festival de cine online del mundo, Atlántida Film Fest, cumple ocho años con la misión de dar a conocer al público las mejores películas internacionales que no llegaron a proyectarse en salas. Superados los 150.000 espectadores, la cita vuelve – del 25 de junio al 25 de julio – para reflexionar sobre el concepto de Europa. Un total de 83 películas agrupadas en cinco bloques temáticos acogen una programación que va  de las preocupaciones de los jóvenes millenials a los conflictos migratorios, pasando por la importancia de la memoria histórica y la lucha eterna a la que se sigue enfrentando el colectivo LGTBIQ. Te invitamos a acompañarnos cada viernes en un repaso por algunas de las piezas que componen esta edición, de la que puedes disfrutar por sólo 15 euros; 5 si ya eres suscriptor.

LIMPIEZA ÉTNICA EN ACCIÓN
Bárbara Sarmentera
'El venerable W.' en Filmin

El director francés Barbet
Schroeder

completa su trilogía del mal, que tuvo comienzo en 1974 con el general
Idi Amin Dada y continuó en 2007 con una mirada al controvertido abogado
francés Jacques Verges, con un escalofriante retrato del monje budista cuya
retórica islamofóbica aviva la limpieza étnica en Myanmar (Birmania).
Tras haber
conmovido al público del aclamado Festival de Cannes, ‘El venerable W.’ se cuela en el festival para mostrar el
lado más oscuro del budismo, la llamada religión de la paz.

A lo largo de 100 minutos, Schroeder tiene una forma inquebrantable de
capturar la propuesta y la razón de ser de
Ashin
Wirathu
, líder del movimiento antimusulmán en Birmania, sin ningún tipo de
filtro. Envuelto en túnicas color azafrán y con un rostro que rara vez muestra un ápice de emoción, el líder birmano se presenta a través
de tomas de una entrevista que el director le hizo en la biblioteca del
monasterio de Mandalay.
El monje habla abiertamente sobre lo que denomina ‘la
amenaza musulmana’, subrayando su naturaleza
animal y la violaciones sufridas por las mujeres birmanas. Sin embargo, es la
disyuntiva entre su religión y el nacionalismo rabioso de sus
sermones, escritos y declaraciones, lo que dirige la mirada del espectador hacia la impactante intolerancia.
 
8/10.


ENTRE EL CONTROL Y EL DESEQUILIBRIO
Belén Calvín
'Tower. A bright day' en Filmin
‘Basado
en hechos futuros’ es la frase que abre el debut de la directora polaca Jagoda
Szelc
‘Tower. A bright day’. Un largometraje inquietante, que logra una
perfecta atmósfera de desasosiego y mantiene la sensación de que
algo extraño puede suceder en cualquier momento.
La historia se centra en la
relación de dos hermanas llamadas Mula y Kaja, la cara y la cruz de la familia, la torre
y la luz. Mula es la hermana mayor, trabajadora y responsable, además de quien ha tenido
que hacerse cargo de la familia. Tanto de una madre enferma como de la
hija de Kaja, Nina, a quien esta abandonó cuando desapareció hace seis años. Será la celebración de la comunión de la pequeña lo que propiciará el reencuentro familiar. Kaja, en cambio, es un enigmático personaje que parece
ausente, pero cuya aparición tiene siempre un gran impacto en su entorno.

Una
obra onírica y con estilo propio, siempre en la frontera entre dos mundos e
incluso entre dos géneros, el drama y el terror, que terminan fundiéndose.
A pesar de lo interesante del ejercicio y de sus atractivas imágenes,
el relato acaba por perderse en su ambigüedad. En cualquier caso, cuenta con
las destacables interpretaciones de Anna Krotoska y Małgorzata
Szczerbowska
, que funcionan a la perfección en sus papeles opuestos, pero
complementarios, como una suerte de yin y yang. Jagoda Szelc plantea un relato sobre
la religión y la naturaleza, la relación entre madres, hijas y hermanas, las
convenciones y la transgresión. Todas esas relaciones se vertebran, en palabras
de la propia realizadora, en torno a un único tema: la pérdida de control en un
mundo efímero.
 
6/10.

TIEMBLO CUANDO TE MIRO
David Molina
'Postcards from London' en Filmin

‘Mientras nuestra
generación se metía droga, nosotros leíamos libros’.
Mucha son las frases que a
uno le dan ganas de apuntar cuando se pone a ver ‘Postcards from London’, cinta del inglés Steve McLean que sumerge al espectador en los
callejones del Soho londinense, donde un joven de gran belleza llamado Jim
(Harris Dickinson) busca un cambio de rumbo. Dividida en cuatro partes, el público
asiste al proceso que vive el protagonista junto a otros cuatro (guapísimos)
chicos que ejercen la prostitución bajo el nombre de narradores sexis.
Porque decir que son chicos de alquiler
está feo y en la cinta se menciona a Caravaggio, a Velázquez y a Fassbinder una
y otra vez. Porque aquí hay clase y bien de cultura.

Especializados en poner a
tono a los clientes (siempre hombres) mediante debates intelectuales, el equipo
lanza a Jim a un mundo que le hará enfrentarse a un viejo trauma del que
intentará sacar provecho.
La preciosa estética, la fotografía y la
banda sonora son, sin duda, los puntos fuertes de un largometraje sorprendente
que engatusará a los amantes del cine de autor en un proyecto que bien podría
ser una serie de postales del fotógrafo David LaChapelle o la última pasión del
cineasta canadiense Xavier Dolan. Entre recreaciones de pinturas barrocas y un
continuo regodeo ante el poder de lo
bello
, los 90 minutos de producción atrapan por sus mimadísimos aspectos
formales frente a una narrativa a la que le falta mayor dedicación. 
7/10.


LAS REGLAS DEL JUEGO VIOLENTO
Estela Cayón
'A violent life' en Filmin

Presentada
en una proyección especial en la Semana de la Crítica del Festival de Cannes y premio al mejor guion en el Festival de Sevilla, ‘A violent life’ es la segunda película de Thierry de Peretti, el director
corso creador de ‘Los Apaches’. Manteniendo su gusto por utilizar
actores locales y una cámara modesta para transmitir de la mejor manera posible
una realidad incómoda
, la cinta muestra la violencia vivida en una isla como
Córcega, que reúne en un pequeño trozo de tierra a grupos independentistas,
mafia e intereses institucionales no menos peligrosos.

El
protagonista, Stéphane, interpretado magistralmente por el actor no profesional
Jean Michelangeli, es un joven de clase acomodada que en los 90 acaba por
enrolarse en un movimiento independentista, marxista y revolucionario. El largometraje deja ver las posibles motivaciones, derivas e idealismos que se esconden tras
decisiones personales y políticas que muchas veces son totalmente
incomprendidas.
También es una muestra de cómo la violencia atrae más
violencia hasta convertirse en una espiral que atrapa a todos aquellos que se ven
envueltos en ella. Una propuesta interesante que recuerda a la conocida ‘Gomorra’, con unas interpretaciones contenidas y con muchos matices, de la
que podemos obtener diversos paralelismos tanto a nivel local como global. 
8/10. 

EL EXTENUANTE CAMINO AL ESTRELLATO
Sonia Dueñas
'On the road' en Filmin
El
famoso director y guionista Michael Winterbottom continúa explorando la música
y las road movies en ‘On the road’, un largometraje en el que el cineasta
ofrece al espectador la oportunidad de ir de gira junto a la popular
banda británica Alice Wolf.
Las noches durmiendo en el autobús, acudir a una
entrevista tras otra, montar el equipo en la sala, darlo todo en el concierto,
recoger nuevamente el equipo, las celebraciones y charlas en los camerinos, no perderse
una post-party y amanecer cada día en una ciudad distinta forman parte de una vida de lo más ajetreada que se fusiona con idilios inesperados,
sentimientos encontrados, nuevas experiencias, aventuras que consumen gran
energía y valiosos recuerdos.

Pese a la
gran inyección de entusiasmo que se percibe en su primer tramo, poco a poco el
cansancio hace mella entre músicos, actores y espectadores al entrar en un bucle que parece nunca terminar. Junto a ello, y aunque la cinta juega
con los límites entre la realidad y la ficción de forma magistral, es
irremediable darse cuenta de que esta fórmula ya fue utilizada por el autor en ‘9 songs’
, restando cualquier atisbo de originalidad que pudiera darse. Eso sí,
es todo un deleite escuchar a Alice Wolf, ver cómo se esfuerzan hasta la
extenuación para entregarse a una gira que les encumbra y les abre las puertas
del hegemónico mercado estadounidense. 
6/10.