La
fascinación que el cine siente por el desequilibrio humano, las
inseguridades, los temores y, en definitiva, la persona como ser en construcción, conforma ese contrapunto tan enriquecedor de la postmodernidad. Una estela que muchos cineastas exploran a lo largo de sus carreras y que supone toda una
incógnita para un espectador ávido de nuevas sensaciones. El realizador
surcoreano Hong Sang-Soo es un claro ejemplo de esta extraña atracción por
intentar comprender nuestras acciones. Aficionado a radiografiar a los jóvenes en
los albores de la madurez y a cómo estos se enfrentan a un mundo muy diferente del
que conocían, el autor profundiza en las relaciones inesperadas, los romances
intermitentes, la desesperación y la ruptura. En esta ocasión lo hace con su
nuevo largometraje, ‘Lo tuyo y tú’, que llega a la cartelera española este miércoles 12 de abril.
de la Concha de Plata al mejor director en la 64 edición del Festival de San
Sebastián, la historia se centra en los sentimientos de Young-Soo (Kim Joo-Hyuk),
un pintor que mantiene una relación con Min-Jung (Lee You-Young). La alta
adicción a la bebida de la mujer provoca que constantemente tengan discusiones,
ya que tiende a coquetear con otros hombres e incluso a ocasionar peleas. Las habladurías sobre su comportamiento cada vez son más fuertes en el vecindario, a
pesar de que ella niega rotundamente beber alcohol, lo que provoca grandes
dudas en su pareja. Esta crisis no detiene a Min-Jung, o alguien
muy parecido a ella.
nuevo trabajo de Hong Sang-Soo rebosa inteligencia. Durante los casi
90 minutos de metraje, el espectador asiste a los vaivenes de una
relación colmada de extrañezas. Desde el lado más
contemplativo de la narración, sus amistades cobran una
gran importancia, sembrando inestabilidad hasta
conducirles a un punto de inflexión. El registro del autor queda plasmado a
través de los ya típicos perfiles embadurnados de caos existencial, mientras
que los juegos de verdades y mentiras aportan frescura a la hipnótica sencillez
con la que transcurre el relato, desgranando poco a poco algunos toques de elegante humor en su recta final para colmar un clímax original y arriesgado.
algunos rostros conocidos pasean ante la cámara, como el veterano actor Kwon Hae-Hyo,
habitual en las obras del realizador, con quien
también ha contado para su nuevo proyecto, ‘On the beach at night alone’, que
se alzó con el Oso de Plata en la última edición del Festival de Berlín gracias
a la interpretación de la actriz principal, Kim Min-Hee. Igualmente, y como uno
de los sellos de identidad del autor, tampoco falta el personaje en el
que él mismo se ve reflejado: un director de cine frustrado en busca
de una eterna compañera que encara acertadamente el reputado
actor Yoo Joon-Sang, que también forma parte del equipo de confianza de Hong
Sang-Soo.
permanecer a la deriva en una relación llena de desconfianza en la que prevalece la angustia y el dolor hasta el límite de paralizar su vida, no
consigue eclipsar la magnífica actuación de Lee You-Young con un
complejo personaje que conquista gracias a su ambiguo
comportamiento. Sus constantes cambios de humor hacen que su ambivalente
identidad sea una de las más atractivas de todas las que ha desarrollado el
autor en su filmografía. A veces, depresiva y desesperada; otras,
astuta y encantadora, se convierte en el elemento más
interesante de la trama, descolocando al propio espectador, que desea desentrañar el aura misteriosa de la joven a
toda costa.
El
minimalismo campa a sus anchas en un trabajo fotográfico que acompaña con
sobriedad la sencillez de la trama. Park Hong-Yeol forma parte del indispensable equipo de Hong Sang-Soo,
resaltando el brillo y la frescura de unos escenarios que, más allá de la movilidad que favorece la luz del día y la estaticidad de la noche,
arropan la enigmática historia de ‘Lo tuyo y tú’. Sin necesidad de
grandes ostentaciones, el cineasta sabe cómo ganarse al público internacional con unos
ingredientes que fusionan extrañas personalidades, naturalidad y una huella imborrable desde sus inicios. Un nuevo título surcoreano que vuelve a demostrar el buen estado del cine de autor asiático.