EXTRA!
Joseph Mount en La Riviera



Aunque más de uno
llegase a los primeros acordes de ‘Back together’ con algunas copas de más, las
expectativas para ver por primera vez en una sala de Madrid a la banda inglesa de
electropop Metronomy eran importantes.
Quizá tuvo que ver en el achispamiento
de buena parte del público que las puertas de La Riviera se abrieran a las
19.30 h. y el concierto no arrancase hasta las 21.15 h. de la noche. Fuera como
fuese, lo cierto es que la noche del 28 de octubre en la
capital fue una golosina llena de ritmos sintéticos que sirvió para repasar la discografía
de un grupo habitual en grandes festivales, que un día antes hizo lo propio en el BIME Live de Bilbao.



Para placer de quienes
no pudieron asistir a la comentada actuación de la banda británica el pasado mes de junio
en el barcelonés
Primavera Sound, la del sábado fue la cita perfecta para
acercarse a
las canciones pegadizas del proyecto liderado por el compositor,
productor y auto multinstrumentalista Joseph Mount
, que hasta un año después de
lanzar al mercado
‘Summer 08’ no se ha decidido a presentar los temas de un
trabajo titulado como aquel verano que lo cambió todo.


Y es que en ese momento
salió a la venta ‘Nights Out’, el segundo álbum de la formación, con el que rozaron el cielo al verse inmersos en un desenfrenado ritmo de conciertos. Piezas como ‘My heart rate rapid’ y ‘On dancefloor’ recordaron en Madrid un disco que hoy encuentra su secuela en ‘Summer 08’, un LP que mira atrás mientras
observa cómo avanza el mundo tras un parón necesario para coger fuerzas y
encerrarse en el estudio.

Metronomy en Madrid

Si bien el último trabajo llegó a las tiendas el pasado 1 de julio de 2016, la frescura de piezas como ‘Miami logic’, ‘Old skool’ y ’16 beat’ es
innegable, con permiso de ‘The bay’ que no tardó en hacer saltar a todos los
presentes, himno donde los haya del aplaudido ‘The English Riviera’.
Coreadísima
fue ‘Love letters’, una celebración esperada por el cuarteto inglés, vestido de
un blanco impoluto del que sólo huyó el bajista, Olugbenga Adelekan.

Un exquisito sonido
reinó en la sala de las míticas palmeras, donde se pudo disfrutar de un recital
que superó – por poco – los 75 minutos, a pesar de los 18 temas que el grupo
interpretó en un escenario que se llenó de luces de colores
durante toda la
actuación. Lo que quizá para algunos pudo ser un chorreo de melodías efectivas con las que pasar el rato,
para muchos supuso la confirmación de una propuesta sólida tras la
que se observa un proceso creativo envidiable.

Con el predominio de
los temas de su quinto trabajo, Metronomy dejó para el final grandes bazas como
(la reconocible desde su intro) ‘The look’ y ‘Everything goes my way’, con
Mount a la batería y Anna Prior al micro, desatando la euforia colectiva.
Las
continuas palabras de cariño y agradecimiento al público congregado, así como
la decisión de tapar los instrumentos con unos paneles iluminados, definieron
una velada en la que el buen hacer de los dos teclados fueron esenciales en
una cita bien medida y diseñada para no dejar de bailar.


Texto de David Molina.