EXTRA!
La Casa Azul no es para cualquiera. Hay que dejarse llevar por el optimismo, la imaginación colorista y los ritmos bailables que el grupo del polifacético Guille Milkyway imponen en la pista para poder disfrutarlo como es debido. La gira de ‘La Polinesia meridional‘ llegó a su fin el pasado fin de semana en la madrileña Sala Ocho y Medio – donde también la abrieron en su día – y allí estuvimos nosotros para disfrutarlo.
Con el cartel de entradas agotadas desde hace semanas, la formación comenzó la actuación con una intro a la que siguió ese hit llamado ‘Los chicos hoy saltarán a la pista’ con el que los presentes hicieron honor al título del tema con una actitud que mantuvieron durante todo el concierto, bailado, coreado y aplaudido sin descanso. Impagable el momento en el que saltó una alarma de la sala y el mismo Guille paró la actuación para solucionarlo y regresar al micro vitoreado por su público. ¿Cómo se transmite la emoción de los fans cantando el estribillo de ‘Chicle Cosmos’ con la letra proyectada en pantalla grande? Viviéndolo, no hay otra.
Temas como ‘Chicos malos’ y ‘La fiesta universal’ derriten al más escéptico mientras ‘Como un fan’ revoluciona el corazón del más frívolo. ¿A quién no le han destrozado de esa forma alguna vez? Precioso tema que destacamos de una actuación de más de dos horas en la que el pop reinó en una sala repleta de emociones a flor de piel.
Allí no cabía un alma y aún así el buen rollo era increíble. Guille Milkyway se apoyó en unos visuales espectaculares que le han acompañado durante toda la gira de este cuarto álbum de estudio, publicado a finales de 2011. Difícil nombrar a algún grupo del panorama musical español que tenga directos tan potentes como los de La Casa Azul.
Lo mismo te dejan boquiabierto en el FIB que acaban con tu energía en una sala de Malasaña: el escenario es lo de menos, ellos siempre ganan la partida. Y el público, que rebosa felicidad cada vez que acude a verles a alguno de sus conciertos. Épico.