EXTRA!
Es posible que si hablamos de Joni Antequera pocos sepan a quién nos referimos, pero seguro que si mencionamos su segundo apellido, Amatria, y su hit ‘Chinches’, cuyo videoclip acumula
cientos de miles de reproducciones en Youtube, la cosa cambie. El ciudadrealeño nacido en el año 1984 lidera una de las propuestas
independientes españolas más interesantes de la actualidad, con un tercer disco
que supone un punto y aparte en la carrera de este diplomado en Arquitectura
Técnica, sobre todo por el salto dado a nivel de producción, una vez fichado por
Subterfuge.
El pasado sábado 12 de marzo, la mítica Sala Caracol de
Madrid acogió la actuación del cantante tras entrar en calor con el músico valenciano Daniel Belenguer, más conocido como Bearoid. Las canciones
bailables y vertiginosas del productor dieron paso a un electrónico directo de Amatria que
arrancó, pasadas las 22.15 h., con el mismo tema que abre su último LP, ‘Me
falta algo’.
El sonido sintético y las letras adictivas del que puede
considerarse su mejor disco estuvieron acompañados por guitarra, teclado, bajo
y batería. ‘Vale lo que vale’ y ‘El pin up me va a matar’ hizo mirar
atrás a un público que llenó la sala hasta los topes, dispuesto en todo momento
a corear, saltar y bailar las hipnóticas letras del castellano-manchego, que en
los próximos meses actuará en citas como el SanSan Festival de Gandía o El Festival de los Sentidos de Albacete.
Madrid acogió la actuación del cantante tras entrar en calor con el músico valenciano Daniel Belenguer, más conocido como Bearoid. Las canciones
bailables y vertiginosas del productor dieron paso a un electrónico directo de Amatria que
arrancó, pasadas las 22.15 h., con el mismo tema que abre su último LP, ‘Me
falta algo’.
El sonido sintético y las letras adictivas del que puede
considerarse su mejor disco estuvieron acompañados por guitarra, teclado, bajo
y batería. ‘Vale lo que vale’ y ‘El pin up me va a matar’ hizo mirar
atrás a un público que llenó la sala hasta los topes, dispuesto en todo momento
a corear, saltar y bailar las hipnóticas letras del castellano-manchego, que en
los próximos meses actuará en citas como el SanSan Festival de Gandía o El Festival de los Sentidos de Albacete.
Caracterizado por un gran dinamismo y la ausencia
de esos típicos cortes entre temas que rompen el ritmo, el directo brilló por la
interacción del artista con sus seguidores, con quienes se mezcló en ‘El golpe’,
compartió tristeza en la preciosa ‘El perro del vecino’, recuerdos de su
llegada a Madrid en ‘Hay miedo’ y prendió la mecha de la euforia en los
primeros acordes de la pegajosa y kafkiana ‘Chinches’, nacida de la plaga que
infectó su casa en Lavapiés, que también sirve para hablar de
quienes imponen sus normas y atacan sin miramientos.
de esos típicos cortes entre temas que rompen el ritmo, el directo brilló por la
interacción del artista con sus seguidores, con quienes se mezcló en ‘El golpe’,
compartió tristeza en la preciosa ‘El perro del vecino’, recuerdos de su
llegada a Madrid en ‘Hay miedo’ y prendió la mecha de la euforia en los
primeros acordes de la pegajosa y kafkiana ‘Chinches’, nacida de la plaga que
infectó su casa en Lavapiés, que también sirve para hablar de
quienes imponen sus normas y atacan sin miramientos.
Aunque lo cierto es que los apenas 70 minutos de concierto
pasaron volando, hubo tiempo para cantarle al bono de 11 baños que pagó por 20
euros, para huir de la gente que nos complica la vida en ‘Comevegetal’ y para
un bis coronado por las heridas abiertas en ‘Atarax’, sin olvidarnos de una celebrada
versión de ‘La copa de Europa’ del laureado grupo granadino Los Planetas.
pasaron volando, hubo tiempo para cantarle al bono de 11 baños que pagó por 20
euros, para huir de la gente que nos complica la vida en ‘Comevegetal’ y para
un bis coronado por las heridas abiertas en ‘Atarax’, sin olvidarnos de una celebrada
versión de ‘La copa de Europa’ del laureado grupo granadino Los Planetas.
Perfeccionista en la ejecución y con una gran seguridad sobre
las tablas, Amatria revolucionó la sala madrileña recordando viejos tiempos con
la presencia de temas de sus anteriores trabajos (‘Hoy van a salirte las alas’ y ‘Salir ileso’) y la presentación de una nueva etapa en la que pisa fuerte, consciente
de que ha llegado el momento de mostrar sus cartas y consolidarse. Que el
talento está de su parte es innegable.
las tablas, Amatria revolucionó la sala madrileña recordando viejos tiempos con
la presencia de temas de sus anteriores trabajos (‘Hoy van a salirte las alas’ y ‘Salir ileso’) y la presentación de una nueva etapa en la que pisa fuerte, consciente
de que ha llegado el momento de mostrar sus cartas y consolidarse. Que el
talento está de su parte es innegable.
