EXTRA!
A modo de homenaje por los 30 años de activismo del colectivo que
reivindica el papel de la mujer en el mundo del arte, Guerrilla Girls, la Nave 16 de Matadero Madrid
acoge una retrospectiva que reúne la práctica totalidad de sus trabajos e invita a los visitantes a la reflexión hasta el próximo 26 de abril.
Todo comenzó en 1985. Frente al MoMA de Nueva York, un
grupo de mujeres con máscaras de gorila (como símbolo del dominio masculino y fonéticamente parecido a guerrilla en inglés) y nombres de mujeres insignes ya fallecidas se manifestaron para concienciar de la
discriminación que las mujeres artistas experimentaban con la aprobación de autoridades e instituciones culturales y sociales. Nadie sacó a la luz sus nombres,
pero el mensaje sigue resonando en
nuestros tiempos con la misma vigencia, rebeldía e ironía que por aquel entonces.
grupo de mujeres con máscaras de gorila (como símbolo del dominio masculino y fonéticamente parecido a guerrilla en inglés) y nombres de mujeres insignes ya fallecidas se manifestaron para concienciar de la
discriminación que las mujeres artistas experimentaban con la aprobación de autoridades e instituciones culturales y sociales. Nadie sacó a la luz sus nombres,
pero el mensaje sigue resonando en
nuestros tiempos con la misma vigencia, rebeldía e ironía que por aquel entonces.
Guerrilla Girls transmiten y
demuestran con numerosos datos (todos ellos en inglés, eso sí, puesto que los objetos de la exposición son los originales del colectivo) lo lejos que está el mundo artístico de
alcanzar cierta igualdad pese a la vanguardia y modernidad que promulga, situándose muy por detrás de otras esferas sociales. Como reza uno de los carteles de la muestra, ‘hasta el Senado de Estados Unidos es más progresista que Hollywood. Senadoras 14%. Directoras de cine 4%’.
demuestran con numerosos datos (todos ellos en inglés, eso sí, puesto que los objetos de la exposición son los originales del colectivo) lo lejos que está el mundo artístico de
alcanzar cierta igualdad pese a la vanguardia y modernidad que promulga, situándose muy por detrás de otras esferas sociales. Como reza uno de los carteles de la muestra, ‘hasta el Senado de Estados Unidos es más progresista que Hollywood. Senadoras 14%. Directoras de cine 4%’.
La ironía recorre cada una de las piezas de
un colectivo que protesta por el exceso
de desnudos femeninos en los museos, algo que contrasta con el número de mujeres
artistas que firman las obras: ‘¿tienen que estar desnudas las mujeres para formar parte del Museo Metropolitano de Nueva York? Menos del 5% de los artistas expuestos en las secciones de arte moderno son mujeres, pero el 85% de los desnudos son femeninos’. También reflexionan sobre el aborto, la doble discriminación que sufren
las mujeres de raza negra y sobre cómo la
mayoría de críticos son hombres que se dedican a escribir sobre otros hombres.
un colectivo que protesta por el exceso
de desnudos femeninos en los museos, algo que contrasta con el número de mujeres
artistas que firman las obras: ‘¿tienen que estar desnudas las mujeres para formar parte del Museo Metropolitano de Nueva York? Menos del 5% de los artistas expuestos en las secciones de arte moderno son mujeres, pero el 85% de los desnudos son femeninos’. También reflexionan sobre el aborto, la doble discriminación que sufren
las mujeres de raza negra y sobre cómo la
mayoría de críticos son hombres que se dedican a escribir sobre otros hombres.
En uno de los carteles describen con grandes dosis de esa acidez que les caracteriza las ‘grandes ventajas’ de ser mujer y dedicarse al arte, como trabajar sin la presión del éxito, tener la
oportunidad de escoger entre tu carrera o la maternidad, estar segura de que
cualquiera que sea el arte que una mujer realice será señalado como femenino o la inclusión de su nombre en revisiones de la historia del arte.
oportunidad de escoger entre tu carrera o la maternidad, estar segura de que
cualquiera que sea el arte que una mujer realice será señalado como femenino o la inclusión de su nombre en revisiones de la historia del arte.
Una propuesta provocadora y reflexiva organizada por Alhóndiga Bilbao que invita a un
debate que por desgracia continúa siendo necesario en la actualidad. Guerrilla Girls
lanzan un grito al mundo para que se ponga remedio a la discriminación y evitemos quedarnos sin apreciar esa otra mitad
del cuadro que sólo las mujeres y las minorías pueden mostrar.
debate que por desgracia continúa siendo necesario en la actualidad. Guerrilla Girls
lanzan un grito al mundo para que se ponga remedio a la discriminación y evitemos quedarnos sin apreciar esa otra mitad
del cuadro que sólo las mujeres y las minorías pueden mostrar.