EXTRA!



Hay muchas formas de definir el término exquisito. Decía el
famoso escritor y compositor británico Anthony Burgess que una comida bien equilibrada es como
una especie de poema al desarrollo de la vida.
Y esa es también una manera de hablar
de la perfección, haciéndolo de momentos cuyo sabor dejan un sabor a gloria que
difícilmente se olvida. Piensa un momento en los restaurantes que te han
causado una profunda felicidad y deja que te hablemos de cuál será el siguiente
en hacerlo.


Lobby Market abrió sus puertas hace tres años en el número 10
de la Gran Vía madrileña con una propuesta gastronómica tradicional con toques fusión.
Tras fidelizar al público de la capital, con una
fuerte presencia de turistas que llegan recomendados por anteriores viajeros, y
convertirse en un punto de encuentro de influencers
y foodies, el local apuesta por algunos de los platos más tradicionales de la cultura española
al mismo tiempo que se atreve con creaciones contemporáneas.

El multiespacio perteneciente al grupo The Lobby Café combina diferentes ambientes con una estética vintage que lo impregna todo. Con un horario de 12.00 a 02.00 h.
durante toda la semana
, la primera estancia es una zona de bar
con barra de mármol, mesas altas y mesas bajas desnudas junto a un área gourmet en las que la ensaladilla rusa,
la tortilla de patata y las croquetas caseras se sirven sin importar la hora
del día, lo mismo que ocurre con una potente variedad de cócteles.


El equipo de Julio Touza se ha encargado de una decoración en
la que los tonos marrones se complementan con plantas naturales en un local
con paredes de ladrillo rústico de las que cuelgan fotografías de mercados de
todo el mundo. Además de la zona propia del restaurante, los comensales pueden
disfrutar de espacios chill out donde
encontrar mayor intimidad. Las luces cálidas dominan toda la instalación. El
cuidado por la ambientación concuerda, esta vez sí, con la calidad de una carta deliciosa.

Ya en sus mesas, con manteles de hilo y sillas traídas de la
Maison Du Monde de París, se presenta una cuidadísima propuesta gastronómica.
Uno de los platos estrella del restaurante es, sin duda, el que conforman los
langostinos tigre tempurizados con salsa kimuchi, elaborada a base de
guindillas, cebolla y ajo.
Su carnosidad junto al generoso baño en la salsa lo
convierten en una opción imprescindible entre sus entrantes.

Triunfan, también, las riquísimas alcachofas fritas con
chipirones
y el risotto de boletus y trompeta de los muertos, que llega a la
mesa con la temperatura perfecta para ser degustado y en raciones más que
suficientes. Decantarse por los huevos de corral con patatas, chistorra y
pimientos de padrón
parece otro acierto sin dejar de lado unos entrantes en los
que el punto más fresquito lo pone una burrata ahumada al momento con compota
de tomate casera y albahaca
acompañada de un sabrosísimo pan de nueces.


Entre los pescados hay que prestar atención a las dos opciones que tienen como protagonista al atún de Barbate (Cádiz), ya
sea el tartar con huevas de trucha y ensalada de alga wakame o el tataki con
ensalada oriental y emulsión de wasabi
. La frescura del producto habla por sí
misma. El pulpo a la brasa con mojo rojo, papas arrugas y flor de huevo triunfa
entre el turista, que tampoco deja de lado la lubina, el bacalao o la merluza. En
cuanto a la carne, el solomillo con trinchat
de patata y trigueros
se enfrenta al entrecote a la parrilla con guarniciones
por el primer puesto. La hamburguesa con queso brie y cebolla caramelizada, por
su parte, seduce a los amantes de la cocina callejera.

Llegados a los postres, los 10 minutos de preparación de su
tarta fina de manzana y hojaldre con helado de vainilla están totalmente
justificados
, con una ración contundente (perfecta para compartir) que
sorprenderá a los amantes del dulce pero también a los que prefieran una opción
suave. La tierna torrija de Baileys con helado de turrón durará poco en el
plato una vez se dé el primer bocado.

Con un precio medio de 30 euros y posibilidad de reserva online, su menú del día a 13 euros (11
si se toma en barra) es una opción ideal para conocer uno de los mejores
restaurantes que hemos probado en los últimos meses.
Con esta opción podrás elegir entre una veintena de platos, incluyendo postre o café y bebida. Y si eres amante del vino, el tinto joven con crianza Finca Resalso 2016
de las prestigiosas Bodegas Emilio Moro es una opción intensa, con
aromas frutales y final agradable. La carta líquida roza el centenar de
referencias. Es más que probable que el brindis lo hagas por un local cuyo
diseño, servicio y producto rozan la perfección. Por muchos diccionarios que
definan a su manera la exquisitez, Lobby Market es desde hoy la nuestra.