EXTRA! 

El problema de los montajes escénicos en los que se abusa de caras conocidas es que, en muchas ocasiones, se explota la confianza del espectador para conseguir una taquilla bárbara a costa de una auténtica chapuza. El milagro ocurre cuando uno se encuentra con una producción de calidad a pesar del éxito precedente con el que cuentan sus intérpretes. 

Eso mismo ocurre con ‘Lifting’, la comedia quirúrgica dirigida y escrita por los siempre acertados Félix Sabroso y Dunia Ayaso, que estos días se representa a unos pasos de la Gran Vía madrileña, en el Teatro Infanta Isabel. Miren Ibarguren y Pepa Rus hacen sonreír al caminante que se cruza con alguno de los carteles de la obra y las identifica con sus carismáticos papeles de Soraya y Macu en la serie de televisión ‘Aída’. Muchos de ellos, suponemos, acaban acudiendo al teatro y aplaudiendo con entusiasmo al final de cada una de las 17 escenas que conforman el espectáculo. El reparto, que lo completan las actrices Elisa Matilla y Josele Román, es un acierto absoluto con gran química sobre las tablas. 

Con aire cabaretero y mezcla de crítica y humor, ‘Lifting’ seduce al público mostrándole un buen número de sketches en los que las cuatro actrices se introducen en decenas de personajes que empatizan de una forma feroz con el espectador

Temas como el sometimiento a la dictadura de las apariencias, la soledad, el abandono, el miedo a la vejez, la inseguridad y la competencia en el ámbito laboral se entremezclan en esta obra de hora y media de duración en la que los amantes de las buenas comedias reirán a carcajada limpia. 

Las actrices se bastan de cuatro sillas, dos mesas y alguna peluca para conseguir una de las comedias más divertidas que han pasado por la capital en los últimos años. La cirugía plástica es sólo una excusa como otra cualquiera para presentar al espectador a más de 40 personajes hilarantes que estarán en el Infanta Isabel hasta el próximo 15 de agosto.