EXTRA! 



Las páginas de contactos
y los chats de citas están a la orden del día. Los humanos necesitamos de afecto constante y
con el estrés que llevamos encima es complicado conocer gente. Por eso muchas personas acuden a este tipo de opciones para entablar nuevas relaciones. En esta tesitura se encuentran los
protagonistas de ‘Terapias’, una
comedia disparatada que puede verse hasta el próximo 14 de junio en el Teatro Galileo.


Una obra con texto del dramaturgo norteamericano Christopher Durang, comparado por muchos
críticos con el director de cine Woody Allen por su
lucidez y ácido sentido del humor,
dirigida por Rafael Calatayud e interpretada por Dorleta Urretabizkaia, Mikel Losada, Kepa Errasti, Asier Hernández,
Asier Oruesagasti
y Ana Pimenta, elenco que da vida a unos alocados y desequilibrados personajes.

Pruden
conoce a Óscar a través de un chat
de contactos y decide quedar con él para conocerle, aunque cuando se encuentran
comprueban que, de momento, no son compatibles. Pruden es una maniática de la
perfección y Óscar es un bisexual
con novio al que le gusta conocer chicas para escapar de la rutina. Ambos trabajan con unos psicoanalistas que en realidad necesitan más tratamiento
que ellos. Esta situación desencadena una serie de encuentros que provocan un buen número de escenas disparatadas que pondrán al espectador frente a diferentes comportamientos humanos.


Con una escenografía
sencilla en la que sólo se hace uso de un gran sofá rojo en el que transcurre toda la obra, al fondo del escenario se observa el cambio de actores gracias a una iluminación que acentúa el mundo caótico en el que se mueven los personajes, entre consultas psiquiátricas y restaurantes.

El papel más cómico recae en la Doctora Bornikoff
(Ana Pimenta), psicoanalista de Óscar, a la que le resulta complicado encontrar la palabra adecuada para describir cada situación. Un
personaje que provocará las carcajadas del público y hará más amena la función.
Un montaje vertiginoso de hora y
media de duración en el que cada personaje intenta
alcanzar el equilibro emocional desvelando sus secretos más íntimos en una terapia surrealista
que no les llevará por buen camino. Un
texto entretenido con humor absurdo que deja un sabor agridulce en el
espectador por el riesgo de su propuesta.