EXTRA!

Aunque nos pilla un poco lejos, lo cierto es que aún
recordamos cómo era terminar las clases del instituto y juntarse en el parque
de al lado para despotricar de los profesores, del guapo de último curso y de
lo poco que pegaba la nueva pareja de clase.
Cuando te enteraste de que
aprobaste por los pelos aquella asignatura que tanto te costaba te arrepentiste
de haber rajado tanto del tutor, pero los buenos ratos que pasasteis dándole al
pico no te los quita nadie y dejaron en nada los remordimientos.

Aquel rubio tan atractivo acabó colgándose del hermano de tu
vecina y la sorpresa no impidió que siguierais de marujeo en el grupo de
amigos. Y es que por mucho que hoy reproches a tu abuela que se junte a
chismorrear con sus vecinas… ¡tú eras igual! Aquellas pipas tan
adictivas eran cómplices de tantos momentos de susurros,
carcajadas y confesiones.

¿Porque qué piensas si te decimos Pipas G? En las reuniones
de amigos, tardes de películas y conversaciones interminables, ¿no? De hecho,
muchos dejamos de mordernos las uñas cambiando esa manía por
el crujiente crack que hoy
protagoniza la divertidísima nueva campaña de las pipas de Grefusa.
No nos
sorprendería nada que la melodía empezase a tararearse por las calles sin
parar. ¡Se pega!
Por si fuera poco el sabor saladito de las pipas de
siempre, ahora puedes ir alternando entre opciones tan innovadoras como las de
aguasal, las picantes tijuanas y las baconeras. Y si alguien viene a decirte
que ya está bien con el crack,
suéltale de golpe que las pipas tienen alto contenido en vitamina e, magnesio y
fósforo, además de ser una fuente de fibra y hierro.
Le dejarás tan loco como a
nosotros las variedades de Grefusa.