EXTRA!



Barrios como Malasaña, Conde Duque y Salamanca se han
especializado en reunir multitud de espacios acogedores que
combinen la calidad del producto con el cuidado en el diseño del espacio. Las
cafeterías vintage, la gastronomía
del último rincón del planeta y los bares de viejo con Jim Morrison de fondo
acompañando las charlas entre un público que en los últimos tiempos se piensa
muy bien donde tomarse un cortado o llevar a su pareja a cenar son una
constante que de tanto buscar la diferencia se acaban convirtiendo en
una carta más de la baraja.


Si hoy en día es posible viajar a Camden Town o Portobello en
Londres, a Les Puces en París o a los mercados del norte de Europa sin salir de
Madrid, también es cierto que no hay que alejarse para disfrutar de los crêpes
más deliciosos que hemos probado hasta ahora. Prep’ la Crêpe abrió sus puertas
a principios de 2015 en el número 25 de la Calle Génova, donde un joven
licenciado en Administración y Dirección de Empresas nacido en Londres, Bruno
Nath López
, decidió abrir una crepería fascinado por el éxito que estas tenían
en países como Francia e Inglaterra. Con el objetivo de convertir el proyecto
en una cadena que ya cuenta con un segundo espacio en el número 33 de Preciados, lo cierto es que sus precios, trato al cliente y calidad del
producto sirven para pronosticar que tiene todas las de ganar.


Elaborando los crêpes según la más pura tradición bretona, lo
primero que llama la atención cuando se entra en el pequeño local es la cocina
a la vista de un público que, además de desayunar, comer, merendar y cenar en
alguna de las mesas, pueden hacer uso de la opción take away con la que disfrutar de un
buen crêpe mientras continúa su camino.
Convertido en uno de los must de la feria de foodtruck MadrEAT de la capital, Prep’ la Crepe presenta una
carta que diferencia los crêpes salados de los dulces, además de ofrecer
ensaladas, una amplia oferta de desayunos y un buen número de bebidas frías y
calientes. Se extraña, eso sí, la leche de soja para disfrute de veganos e
intolerantes a la lactosa amantes del café.


El local, diseñado en tonos marrones por el prestigioso estudio de interiorismo
Cousi, cuenta con un coqueto salón inferior en el que, además de presumir de una
iluminación más tenue, es posible celebrar eventos y utilizarlo como espacio en
el que dar clases o disfrutar de una cena de grupo. Con una capacidad total de 70 comensales (entre la terraza, la planta
superior y el salón inferior), su horario continuo de lunes a sábados (domingos
cerrado) y la posibilidad de realizar reservas (de lunes a jueves) a partir de las 7 de la tarde
suma puntos a un local en el que el menú a 9,95 euros (suplemento de dos euros
en el caso de los crêpes gourmet) es una de las opciones más atractivas a la
hora de llenar el estómago, incluyendo un crêpe, una ensalada y un refresco o
cerveza.

El precio de los crêpes varía entre los 3,75 y los 7,95 euros, con opciones dulces tan atractivas como la del chocolate belga Callebaut
(blanco, negro o con leche), al que se pueden añadir extras como plátano, fresa
o avellanas. En cuanto a la oferta salada, el de albahaca (mozzarella, tomate,
albahaca y Cheddar) triunfa tanto como el especial de la casa, ‘La Prep’, con
jamón york, huevo y Cheddar. Para los más sibaritas, las setas, el salmón y el
pisto de verduras conforman variedades a tener muy en cuenta.


Una de las claves del producto de Prep’ la Crepe es su masa,
que se prepara por el propio equipo del local hasta obtener una textura entre
el puncake y la filloa crujiente, un postre típico en Galicia, León y Asturias.
Pensando en el público celiaco, disponen de masa sarracena (sin gluten) y sin
lactosa tanto para crêpes dulces como para salados.
Se trata de una deliciosa
masa más gruesa que, sin embargo, no evita que la plancha pueda contener trazas
de gluten por contaminación cruzada.



Un equipo encantador formado por personas de países como
Francia, Colombia y Portugal hacen sentir como en casa a
un comensal que rara
vez pagará más de 15 euros por persona.
A dos pasos de la estación de tren de
Recoletos y de los metros Colón y Alonso Martínez,
Prep’ la Crepe aporta un
toque diferente a una calle repleta de oficinas que no impiden que familias,
parejas jóvenes y grupos de amigos se rindan ante los exquisitos 
crêpes de un
local con encanto y futuro prometedor.