EXTRA! 

En el número 60 de la misma calle Diego de León, justo al lado del Hospital de La Princesa y en pleno barrio de Salamanca, se encuentra un local desenfadado, con una cocina non stop adaptada a las necesidades del público madrileño, donde lo que importa por encima de todo es la atención al cliente y la calidad del producto. Hablamos de Juanyta Me Mata!


Juana Reinoso es una joven empresaria que se define como exigente y apasionada con su negocio. Aunque de primeras podríamos pensar al verla que se trata de una estilosa modelo de pasarela, lo cierto es que uno se encuentra con una mujer que muestra un gran cariño por un espacio de cuya decoración se encargó el afamado interiorista Ignacio García de Vinuesa. Primer acierto, sin duda, el que supone un espacio en el que se diferencian varias mesas altas con taburetes junto a confortables bancadas de sillones y mesas para distinto número de personas. 


El volumen bajo de la música, la perfecta climatización del local y una selección cromática en la que dominan el morado, el crema y el negro consiguen que el comensal se sienta cómodo en un local con amplios ventanales que también cuenta con terraza propia. 


Ya en mesa, nos encontramos con dos cartas: la de Delicias, con raciones cuyos precios van de los 5 a los 8 euros, y la que distingue la amplia selección de vinos de los primeros, segundos y postres. Interesante opción la del servicio de descorche, que por 5 euros permite llevar el vino que te apetezca. El precio medio de la carta oscila los 20 euros, con un menú del día que incluye primero, segundo, postre, pan y bebida por 11,50 euros.

Aunque nos quedamos con ganas de probar su famoso salmorejo cordobés, nos dejamos guiar por Juana y probamos algunas de sus Delicias favoritas. Comenzamos probando un pulpo a la parrilla con patata y aceite de pimentón, que llega a la mesa a la temperatura perfecta y nos sirve para percatarnos de la frescura del molusco desde el primer mordisco. La patata se deshace en boca y combina de lujo con el sabor del pulpo.


Continuamos con unas gambas a la gabardina que llegan acompañadas por una suave salsa de yogur que permite jugar con dos texturas que ofrecen un resultado delicioso en uno de los platos más gustosos que tuvimos la ocasión de degustar. 


Los huevos rotos con jamón ibérico se presentan en una pequeña cazuelita en la que también hay sitio para unas patatas naturales. Se trata de un plato sencillo en el que se agradece la jugosidad del jamón. De un plato típico pasamos a unos chipirones a la parrilla que recomendamos a cualquier visitante: por 7 euros se disfruta de un plato totalmente natural, fresco y sabroso.


No podíamos despedirnos de los tenedores sin probar algunas de las carnes de Juanyta, decantándonos por el plato de solomillitos de ternera gallega con patatas paja y pimientos. Vuelve a destacar la excelente materia prima de la que disponen en cocina, algo que, sin duda, no dejará chistar a los comensales más exigentes.



Antes de los cafés probamos la torrija caramelizada de brioche y yema tostada, postre favorito de muchos comensales y de la mismísima propietaria. Un deleite para los más golosos que llega templado a la mesa y no empalaga. Riquísima.


Siempre es un gusto conocer locales en los que, a un precio accesible, se disfruta de un producto excelente, con un servicio atento y donde además se puede mantener una conversación tranquila sin que moleste la música. Juanyta me mata también ofrece servicio de take away y catering, algo por lo que ya se han interesado multitud de eventos y hasta los médicos del Hospital Clínico y el de La Princesa, que suelen contar con sus productos en la celebración de sus convenciones.


En el local es posible comenzar el día con sus desayunos o terminarlo con la primera copa gracias a su amplio horario, de lunes a jueves de 07.00 a 01.00 h.; viernes hasta las 02.00 h.; sábados de 12.00 a 02.00 h. y domingos de 13.00 a 00.30 h. Como no cierran sus puertas ningún día de la semana, ya no tienes excusa para hacerles una visita. Te aseguramos que te encantará.