![Madrid, ¡qué bien resistes!](https://madtime.es/wp-content/uploads/2019/04/Madrid252C2B25C225A1qu25C325A92Bbien2Bresistes2521.jpg)
Saber y no recordar es lo mismo que ignorar. Hoy vivimos disfrutando de una ciudad de Madrid acogedora, bulliciosa y siempre repleta de planes e historias que vienen y van. Pero, a diferencia de otras capitales europeas, la nuestra no parece rememorar los dramas de su historia más reciente, el horror de la guerra que nos envolvió el siglo pasado.
En 2019 se cumple, precisamente, el 80 aniversario del fin de la Guerra Civil española. Y uno de sus más críticos episodios fue la larga resistencia de Madrid frente a las tropas sublevadas: 850 días estuvo la capital sitiada, siendo la primera ciudad en la que se bombardeó a objetivos civiles, algo que después se extendería a otras urbes españolas por parte de la Legión Cóndor de Hitler y la Aviazione Legionaria de Mussolini como terreno de pruebas para la desolación europea. Fue ese Madrid Bombardeado el que adoptó el ‘No pasarán’ con la esperanza de convertirse en la tumba del fascismo, que sin embargo finalmente entraría en sus calles y después arrasaría Europa.
La historia de aquellas calles bajo la metralla es la que hasta el próximo 20 de mayo recoge la exposición ‘Madrid, ¡qué bien resistes!’, en la céntrica Casa de la Panadería (Plaza Mayor, 27). Sin embargo, lejos de limitarse a recuperar ese Madrid desgarrado, la muestra del fotógrafo Javier Marquerie Bueno enfrenta la realidad de la guerra con la actualidad. Y lo hace a través de medio centenar de obras en las que el pasado y el presente se solapan y se miran. Una crónica visual de los barrios de la ciudad con duras historias aún latentes; relatos que no deberíamos olvidar porque los grandes errores del pasado a menudo amenazan con regresar si no se reconoce lo que supusieron.
![Técnica de la refotografía](https://madtime.es/wp-content/uploads/2019/04/T25C325A9cnica2Bde2Bla2Brefotograf25C325ADa.jpg)
Mediante la técnica de la refotografía, consistente en solapar las imágenes tomando dos fotos desde el mismo punto y ángulo, Marquerie crea lazos entre las instantáneas en blanco y negro y un Madrid de color. Un contraste que invita a reflexionar sobre cómo los españoles entonces y ahora pisamos las mismas calles, giramos en las mismas esquinas y nos refugiamos en nuestro día a día. Un retrato de hermanos madrileños de ayer y de hoy.
La exhibición, patrocinada por la Oficina de Derechos Humanos y Memoria del Ayuntamiento de Madrid, se divide en cinco capítulos que retratan ‘La vida’, ‘El viaje’, ‘El cascote’, ‘La guerra’ y ‘La sangre’. En ellos se recogen episodios que van desde el inicio del levantamiento militar de 1936 hasta un Madrid ya derrotado en 1939.
Con entrada gratuita, la exposición puede visitarse de martes a domingos de 11.00 a 20.00 h., junto al puesto de Información de Turismo de la Plaza Mayor. Los ecos del Madrid que resistió al fascismo retumban en la Sala de Bóvedas de la Casa de la Panadería para recordarnos que ese hilo que nos une con el pasado es más corto de lo que a veces pensamos…