EXTRA!

Una
historia diferente sobre la guerra. De hecho, más bien, un relato con otra perspectiva,
ya que no trata la guerra como conflicto principal, no es cine bélico, presentando el tema como mero hilo conductor.
Sí que tiene como protagonistas el amor,
la supervivencia y el perdón, tres ingredientes básicos de la vida. Se trata de
‘Un largo viaje’ (‘The railway man’), el film del director australiano Jonathan Teplitzky que se estrena este viernes 4 de julio en las salas españolas.

Un
drama histórico, basado en hechos reales, protagonizado por los oscarizados
Colin Firth (por ‘El discurso del rey’) y Nicole Kidman (por ‘Las horas’). Los
actores vuelven a sorprender con un trabajo conmovedor, donde no son los únicos
en resaltar por su buen hacer.
Este es el caso de un muy acertado y prometedor
Jeremy Irvine (‘War Horse’), un Hyroyuki Sanada (‘Lobezno inmortal’) que nos
hace replantearnos una y otra vez de qué lado estamos (si es que existe un
lado como tal) y un conocidísimo Stellan Skarsgard (‘Los vengadores’).
La
película está basada en la historia real de Eric Lomax, un veterano británico
de la Segunda Guerra Mundial que sobrevivió a un largo cautiverio en Japón.

Tras años dedicado a rehacer su vida y obsesionado desde su infancia por los
ferrocarriles, decide dar un paso adelante al conocer a Patricia, que se
convierte en el amor de su vida y compañera de un viaje muy particular. Sin
poder dejar de mirar atrás, el antiguo soldado no logra mantener una vida
normal y sus miedos se le aparecen constantemente. Es entonces cuando conoce
el paradero del que fue su captor.

Una
crónica que, aunque no deja indiferente, usa una narración poco acertada en su orden temporal. El largometraje cuenta con un comienzo que engancha al
contar una historia de amor tardía muy creíble por el trabajo de los
intérpretes, aunque fallida en su desarrollo. Lo que realmente hace de ‘Un largo viaje’ una cinta diferente es la
intensidad con la que se describen los crímenes, las torturas y los horrores
que más tarde la Historia callará.
La banda sonora 
acierta a la hora de introducir al espectador en la angustia que se respira, aunque a veces
por su volumen consigue lo contrario.
Si
bien hay puntos que mejorar para convertirse en una obra
maestra, la película remueve al espectador llegando a hacerle plantearse opciones poco comunes en la gran pantalla. ¿Debe vengarse el protagonista tras tanto sufrimiento? ¿Se trataría de venganza o justicia? ¿Se
puede vivir toda una vida odiando? Una historia de supervivencia y perdón en la línea de ‘El velo pintado’ o ‘Australia’ que te sorprenderá.