EXTRA!



En una época en la que las malas noticias ocurren cada día y la esperanza parece abocada a la desaparición, es sorprendente y alentador encontrarse con personas que ponen en marcha proyectos
inspiradores. En el año 2012, David R. Peralto y José Luis Arellano crearon La Joven Compañía, una
iniciativa que reúne a grandes
profesionales con jóvenes artistas a los que se les brinda la oportunidad
de realizar sus primeros trabajos profesionales (remunerados como tal). Todo ello bajo la misión de acercar el teatro a los adolescentes con la puesta en marcha de sesiones
matinales, ideales para la asistencia de centros educativos.
Grandes de la escena, como Juan Mayorga, han escrito o adaptado textos para ellos, siendo premiados en 2014 con El Ojo Crítico de Teatro, otorgado por Radio Nacional de España (RNE).


Esta temporada, la compañía abre el curso reponiendo en su sede habitual, el Teatro Conde Duqueuna revisión de los
textos griegos ‘La Ilíada’ y ‘La Odisea’ en versiones de Guillem Clua y Alberto Conejero,
respectivamente, que el año pasado fue vista por 9.500 personas.
Se trata de
dos obras autónomas que, reunidas bajo el nombre de 
‘Proyecto Homero’, pueden verse en conjunto o por separado, puestas en
escena por el mismo grupo de 15 actores.



Para contarnos el trayecto de Ulises en su regreso al hogar tras terminar la guerra de Troya, el texto de Conejero ‘Odisea’ utiliza un estilo directo y divertido. La dirección de José
Luis Arellano
 destaca por su dinamismo y la gran coordinación
existente entre los jóvenes actores en escena, las diferentes tramas y la gran cantidad de recursos escénicos utilizados, como el vídeo, el
teatro de sombras, la música en directo y el canto.

Ulises; su hijo Telémaco, que harto de esperarle sale a
la búsqueda de su padre; y Penélope,
madre y esposa, están hábilmente encarnados por Samy Khalil, Álex Villazán y Carmen Ibeas. Sus espléndidas interpretaciones se caracterizan por transmitir mucho de una manera desenfadada.
El resto del elenco desborda fuerza y pasión, acompañado de una trabajada escenografía intencionadamente
original. El vídeo, el vestuario, la música y demás recursos, como máscaras y sombras, completan una apuesta clara por acercar el texto a los lenguajes
actuales
sin perder un ápice de su esencia.



Con un ritmo trepidante, la vuelta de Ulises se torna complicada, con un final que parece imposible de alcanzar. A través de las contradicciones del protagonista, de la
visión ingenua de su hijo y de la abnegada fidelidad de su esposa, que sigue
esperando algo que podría no llegar nunca, el montaje habla de la vida, de disfrutar el momento y de cómo el
camino que vamos recorriendo supone la verdadera experiencia vital.
Las metas son
sólo una inspiración y, tanto si se consiguen como si no, lo relevante es aquello que se va consiguiendo por el camino.

Durante la hora y media de producción destaca la
interpelación directa con el público en un claro afán didáctico.
Desde la
introducción de la historia, pasando por los cortes a medio camino del trayecto a modo de recapitulación y
aclaraciones, hasta el desenlace, se introducen momentos en los que todo el elenco
cambia de paso, se quita el personaje de encima y opina sobre lo que ocurre en escena. Un recurso atractivo y muy ameno.
En definitiva, una propuesta interesante que puede verse en
el Teatro Conde Duque los jueves y
sábados a las 20.00 h. hasta el 26 de noviembre, con entradas entre los 8 y los 12
euros. Para ver la experiencia completa del ‘Proyecto Homero’, ‘Ilíada’ se representa los viernes a las 20.00 y los sábados a las 18.00 h.