EXTRA!
Zero Latency en Madrid

Tras
el boom de los escape rooms en los últimos años, cuya originalidad e ingenio
han seducido a todo tipo de públicos, los juegos físicos de equipo han seguido
evolucionando, y vuelven a verse reflejados en el siempre referente mundo de
los videojuegos. Las más recientes mejoras en el sector de la realidad virtual
(VR) hacen que grandes clásicos de los recintos cerrados como los
laser tag de los años 80 y 90 se conviertan en experiencias plenamente inmersivas
,
introduciendo a los jugadores en entornos donde enfrentarse con
seres imaginarios.

Fruto
de esta revolución tecnológica nació en Australia (2015) la firma Zero Latency,
cuya meta era llevar a espacios amplios – y sin la molestia de cable alguno – las
experiencias virtuales, que hasta ahora sólo podían disfrutarse en el
salón de casa con gadgets de alto coste como Oculus Rift o PlayStation VR.
La propuesta de Zero Latency es totalmente wireless: el jugador sólo ha de
llevar puesta una ligera mochila (que contiene un pequeño ordenador), unas
gafas y unos auriculares con micrófono para poder comunicarse con los
compañeros.
La indumentaria queda completada con un arma de plástico de tamaño
mediano con varios sensores que permiten interaccionar en el otro mundo.
En
esa otra realidad, Zero Latency propone enfrentarse a zombies, robots
alienígenas y otros seres de mundos imaginarios.
La firma presume de
que más de 350.000 personas han probado alguno de sus juegos virtuales en
los 22 centros abiertos en todo el mundo, siendo uno de los más exitosos el inaugurado
en 2016 en Madrid. Este local, de unos 200 m2, se encuentra a un par de
manzanas de la parada de metro de Alfonso XIII, accediéndose al mismo por un
patio que tiene su entrada en la calle Pradillo, 54.
Las
partidas, de media hora de duración, permiten que hasta ocho jugadores se
encuentren en un mundo digital, hallándose en realidad en
una amplia sala vacía.
Las gafas VR avisan a los
participantes de la cercanía de otros compañeros de aventura, así como
de los límites físicos del entorno. Es importante saber que, a diferencia de
las gafas 3D de los cines, los visores VR no son compatibles con lentes
graduadas, por lo que es recomendable usar lentillas. El
visor virtual permite un buen nivel de ajuste de hasta 7 u 8 dioptrías de
miopía o hipermetropía para cada ojo, por lo que la mayoría de usuarios no debería tener problema.

Los game masters de Zero Latency
Los
juegos cuentan con puntuación y rankings, al más puro estilo de las batallas con láseres de antaño, aunque todas las estadísticas pueden ser consultadas online. Además, cada partida es guiada por un game master que explica todos los pormenores, ajustes y mecánicas, de manera que el juego se encuentra perfectamente adaptado tanto para
los más novatos como para los titanes de las consolas.
Tras
la buena acogida de los juegos existentes hasta la fecha en Zero
Latency
(
SurvivalEngineerium y Singularity), la marca incorpora Outbreak Origins a su repertorio. Esta nueva aventura transporta a dos grupos
inicialmente separados de cuatro jugadores a la zona cero de un brote zombie. Equipados
con un rifle automático y una escopeta intercambiables, la
misión consiste en escapar de una ciudad en ruinas recorriendo colectores
subterráneos y ascendiendo a lo alto de un rascacielos, todo ello enfrentándose a
hordas de engendros mutantes hasta dar con el imponente jefe final ante el que
ambas cuadrillas se han de unir.
Gráficamente, el juego no deja de ser bastante básico, pero
es la experiencia de realidad virtual compartida lo que prima.
Inevitable escuchar a los compañeros de partida hablar de lo increíble que
resulta moverse físicamente por un mundo virtual
y el vértigo que a algunos
despierta ascender por los andamios de un edificio con el riesgo de la caída. Resulta gratificante e intuitivo ver la respuesta sin lag a los
movimientos del arma, así como a los propios giros y flexiones realizados para
parapetarse tras elementos del decorado.

Equipamiento de juego
En Outbreak Origins los más expertos disfrutarán
apurando la puntería sobre los seres purulentos que atosigan al grupo de
aventureros, mientras que los jugadores noveles (siempre a partir de los 13
años) tendrán la garantía de que las vidas son ilimitadas, aunque obviamente
resten puntuación. El juego cuenta con puntos de control para que nadie
se quede atrás.
Los
turnos de partida de Zero Latency pueden reservarse online, siendo posible hacerlo de 17.00 a 20.00 h. los miércoles y jueves, alargándose hasta las 22.00 h. los viernes, y con
turno de mañana y tarde ininterrumpido los fines de semana. No es necesario
acudir con amigos, ya que pueden adquirirse plazas individuales
y unirse a otros jugadores, como en un modo multijugador de cualquier
videojuego. El precio oscila entre los 35 y 42 euros por persona según la franja
horaria y el tipo de juego.
Ya
sea a solas o acompañado, y tanto para los más avezados consoleros como para los
principiantes en estas lides, Zero Latency supone una experiencia diferente y
novedosa. La nueva propuesta survival zombie anima a enfrentarse a un nuevo reto para liberar
Madrid de zombies una vez más.